Durante la segunda mitad del siglo XIX, los viajeros que comenzaban a visitar los países árabes se quedaron impresionados por una danza muy sensual y colorida conocida como Raks Sharki. Debido a los movimientos de vientre y caderas que no existían en las danzas del viejo continente, la rebautizaron como «danza del vientre», aunque la traducción etimológica de Raks Sharki sea simplemente «danza oriental».Hoy día la Belly Dance como se conoce en los países de habla inglesa se ha popularizado al punto que, en algunos países árabes como Egipto, el Libano o Turquía, no se entiende una celebración sin Danza Oriental.Además de lo exótico, bello y sensual y del protagonismo que otorga a quien la practica, la Danza Oriental tiene grandes beneficios para la salud física y mental.